En 1981, la pequeña compañía Nintendo of America estaba preparándose para el lanzamiento de su legendario juego Donkey Kong. Cuando Mario Segale, el casero de las oficinas que rentaba la compañía, fue a pedir el pago de rentas atrasadas, los miembros de la plantilla de Nintendo decidieron darle el nombre de «Mario» al protagonista del juego que saltaba para esquivar barriles.
Casi 30 años después, Nintendo, que aún produce juegos con este famoso personaje, y Segale, ahora un corredor de bienes raíces en el estado de Washington, hablan muy poco acerca de como uno de los personajes más emblemáticos de los juegos de video obtuvo su nombre y herencia italiana. Benj Edwards, de Technologizer, ha publicado una investigación respecto de esta historia, con detalles realmente interesantes.
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